BAJARSE AL MORO (Adelanto)
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A continuación os muestro un fragmento extraído de la novelita “Bajarse al moro”.
…Después de 15 o 20 minutos andando, llegaron a la parada por donde pasaba el autobús de Algeciras. Cuando llevaban un poco allí, llegó Johny con su primo Selu. Preguntaron en la taquilla cuánto valía el viaje a Algeciras y cuánto faltaba para el próximo autobús. Les contestaron que valía 12 euros y pasaría en una hora y media.
-De acuerdo, gracias –dijo Johny cuando les informaron.
Entonces, mientras los jóvenes pensaban qué hacer y hablaban entre ellos, apareció un Seat Ibiza blanco. De él se bajó un tipo pelirrojo y con gafas de unos 35 años y se puso a hablar con ellos.
-Oye, chavales, ¿a dónde vais? Yo es que tengo que sacarme unas pelas para ayudar al colega. Para que coma algo y no duerma en la calle.
Al decir esto señaló a un hombre algo más joven que él, delgado, con algo de barba y mal vestido que estaba en su coche. Parecía un indigente, o un yonqui, quizá lo fuera.
-Ahh, pues nosotros vamos para Algeciras, ¿nos llevarías? –dijo Nacho Lolo.
-Ah, pues sí, si me echáis gasolina para el viaje y me dais 20 euritos. Así le doy algo al colega para que se compre un bocadillo o lo que sea.
-Venga –dijo Johny-, pues vámonos.
-Sí, sí –se oyó a coro de fondo.
-Vale, pa Algeciras. Toma 5 euritos y búscate la vida. Cómprate algo que después vengo yo y ya nos apañamos –le dijo el pelirrojo a su amigo.
-Lo que pasa es que somos 5 –dijo Johny– y contigo 6.
-Da igual –dijo el conductor–, un poco de vista con la Guardia Civil y ya está.
-Claro, claro –contestó Nacho Lolo– yo voy delante, que soy el más grande.
-Qué cara –dijo Marian con su ronca voz.
-Bueno, yo me llamo Dani –les dijo el taxista ilegal– ¿Y vosotros?
Todos se fueron presentando y dándole la mano. Después se metieron en el coche y partieron rumbo a Algeciras.
-Aquí atrás vamos un poco apretados –comentó El Gordo.
-Picota, echa un poco para allá –le dijo Johny a su primo.
-Aaahh no me aplastéis –protestó Marian.
Como pudieron se acomodaron. Dani hablaba mucho con Nacho Lolo, que viajaba al lado suyo.
-Bueno, Nachete, Nachillo, ¿y para qué vais allí a Algeciras? –preguntó al joven el dicharachero pelirrojo.
-Para nada, a ver a unos colegas y salir por allí esta noche y eso –contestó éste ocultándole la verdad.
-Sí, Lolito, ¿y dónde os quedáis?, Nachete.
-En casa de un colega.
-¿Y cuándo volvéis?
-Mañana.
-¿Y Queréis que os recoja yo?
-Por mí sí, pero pregúntale a Johny, que es el que manda.
-¿Qué dices, Juanito? –le preguntó el Pelirrojo.
-Venga sí, mañana sobre las 6 nos recoges al lado del puerto. De todos modos ya te llamamos mañana.
-Vale, vale, Johny, pichita.
Siguieron avanzando en su camino hacia Algeciras. Durante el trayecto, el conductor fue hablando casi todo el tiempo con Nacho Lolo. Los demás hablaban detrás a su bola.
En poco más de una hora estaban allí.
En las inmediaciones del puerto, Johny dijo:
-Páranos por aquí, Dani.
-Vale.
Dani paró el coche y los chicos se bajaron…
A continuación os muestro un fragmento extraído de la novelita “Bajarse al moro”.
…Después de 15 o 20 minutos andando, llegaron a la parada por donde pasaba el autobús de Algeciras. Cuando llevaban un poco allí, llegó Johny con su primo Selu. Preguntaron en la taquilla cuánto valía el viaje a Algeciras y cuánto faltaba para el próximo autobús. Les contestaron que valía 12 euros y pasaría en una hora y media.
-De acuerdo, gracias –dijo Johny cuando les informaron.
Entonces, mientras los jóvenes pensaban qué hacer y hablaban entre ellos, apareció un Seat Ibiza blanco. De él se bajó un tipo pelirrojo y con gafas de unos 35 años y se puso a hablar con ellos.
-Oye, chavales, ¿a dónde vais? Yo es que tengo que sacarme unas pelas para ayudar al colega. Para que coma algo y no duerma en la calle.
Al decir esto señaló a un hombre algo más joven que él, delgado, con algo de barba y mal vestido que estaba en su coche. Parecía un indigente, o un yonqui, quizá lo fuera.
-Ahh, pues nosotros vamos para Algeciras, ¿nos llevarías? –dijo Nacho Lolo.
-Ah, pues sí, si me echáis gasolina para el viaje y me dais 20 euritos. Así le doy algo al colega para que se compre un bocadillo o lo que sea.
-Venga –dijo Johny-, pues vámonos.
-Sí, sí –se oyó a coro de fondo.
-Vale, pa Algeciras. Toma 5 euritos y búscate la vida. Cómprate algo que después vengo yo y ya nos apañamos –le dijo el pelirrojo a su amigo.
-Lo que pasa es que somos 5 –dijo Johny– y contigo 6.
-Da igual –dijo el conductor–, un poco de vista con la Guardia Civil y ya está.
-Claro, claro –contestó Nacho Lolo– yo voy delante, que soy el más grande.
-Qué cara –dijo Marian con su ronca voz.
-Bueno, yo me llamo Dani –les dijo el taxista ilegal– ¿Y vosotros?
Todos se fueron presentando y dándole la mano. Después se metieron en el coche y partieron rumbo a Algeciras.
-Aquí atrás vamos un poco apretados –comentó El Gordo.
-Picota, echa un poco para allá –le dijo Johny a su primo.
-Aaahh no me aplastéis –protestó Marian.
Como pudieron se acomodaron. Dani hablaba mucho con Nacho Lolo, que viajaba al lado suyo.
-Bueno, Nachete, Nachillo, ¿y para qué vais allí a Algeciras? –preguntó al joven el dicharachero pelirrojo.
-Para nada, a ver a unos colegas y salir por allí esta noche y eso –contestó éste ocultándole la verdad.
-Sí, Lolito, ¿y dónde os quedáis?, Nachete.
-En casa de un colega.
-¿Y cuándo volvéis?
-Mañana.
-¿Y Queréis que os recoja yo?
-Por mí sí, pero pregúntale a Johny, que es el que manda.
-¿Qué dices, Juanito? –le preguntó el Pelirrojo.
-Venga sí, mañana sobre las 6 nos recoges al lado del puerto. De todos modos ya te llamamos mañana.
-Vale, vale, Johny, pichita.
Siguieron avanzando en su camino hacia Algeciras. Durante el trayecto, el conductor fue hablando casi todo el tiempo con Nacho Lolo. Los demás hablaban detrás a su bola.
En poco más de una hora estaban allí.
En las inmediaciones del puerto, Johny dijo:
-Páranos por aquí, Dani.
-Vale.
Dani paró el coche y los chicos se bajaron…
PD: Este "Bajarse al moro" no es la novela de José Luis Alonso de Santos, sino una novelita inédita mía. Aclaro porque alguno lo ha creído.
Etiquetas: Absurdrealismo, Bukowsky, cádiz, drogas, Generación Crisis Siglo XXI, Generación de la Primera Crisis Siglo XXI, juventud, Realismo sucio, Recuerdos, Relato, sordidez
4 comentarios:
Me ha gustado, ¿no hay más?
Que buena historia! Me encanto!
Seguira...?
Hola, lo dicho, si alguien lo quiere íntegro yo se lo mando. Que me de su email y se lo envío. Aquí no voy a publicar más creo.
Interesante, yo he visto la película.
Besitos
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