EL CAMINO DE LA VIDA (CAPÍTULO 8 1/4)
.
.
.
.
.
.
.
.
.
Cuando volví a mi casa me metí en la cama y estuve allí toda la mañana.
..Algo después del mediodía recibí una llamada del jefe.
.
.
.
.
.
.
.
.
Cuando volví a mi casa me metí en la cama y estuve allí toda la mañana.
..Algo después del mediodía recibí una llamada del jefe.
.
..-¿Ya estás bien? –me preguntó.
..-Sí –le contesté con voz tenue.
..-Tienes que cuidarte, que nos vas a dar un disgusto. Aunque… bueno, los libros de los difuntos se venden aún mejor. Sobre todo cuando la acaban de palmar.
..-Déjame, que estoy un poco débil.
..-Que era broma, ¿eh?
..-Ya, ya, vale, pero me voy a la cama.
..-Pero estás bien, ¿no?
..-Sí, pesaooo. Adiós.
.
..-¿Ya estás bien? –me preguntó.
..-Sí –le contesté con voz tenue.
..-Tienes que cuidarte, que nos vas a dar un disgusto. Aunque… bueno, los libros de los difuntos se venden aún mejor. Sobre todo cuando la acaban de palmar.
..-Déjame, que estoy un poco débil.
..-Que era broma, ¿eh?
..-Ya, ya, vale, pero me voy a la cama.
..-Pero estás bien, ¿no?
..-Sí, pesaooo. Adiós.
.
..Me metí en la cama y cuando me di cuenta allí estaba Vicky. En la cama no –qué más quisiera–, delante de mí hablándome.
.
.
..-¿Qué le pasa, Señor Juan Luis? Está cansadillo, ¿no? ¿Ayer qué, bebió mucho?
..-Bueno, un poco. Sí, estoy pachuchillo, ayer me ingresaron en el hospital y todo. Me dio un chungo.
..-¡¿No me diga?!
..-Sí, pero vamos, que fue algo leve, un amago de infarto y una bajadilla de tensión.
..-Jajá. Me rió por no llorar.
..-Te llamo Rafael por no llamarte Manuel.
..-Hay qué ver usted, por lo menos se lo toma a broma. Pero tiene que cuidarse o va pal hoyo.
..-Jejé.
..-¿Y tú qué?
..-Pues… –me dijo y empezó a llorar– mi Paco se ha ido ya. Me dijo que estaba con otra y se largó.
..-Bueno, un poco. Sí, estoy pachuchillo, ayer me ingresaron en el hospital y todo. Me dio un chungo.
..-¡¿No me diga?!
..-Sí, pero vamos, que fue algo leve, un amago de infarto y una bajadilla de tensión.
..-Jajá. Me rió por no llorar.
..-Te llamo Rafael por no llamarte Manuel.
..-Hay qué ver usted, por lo menos se lo toma a broma. Pero tiene que cuidarse o va pal hoyo.
..-Jejé.
..-¿Y tú qué?
..-Pues… –me dijo y empezó a llorar– mi Paco se ha ido ya. Me dijo que estaba con otra y se largó.
.
..«¡¡Bien!!», pensé.
.
..«¡¡Bien!!», pensé.
.
..-Joder, qué pena, lo siento.
..-Síí –contestó llorando–, he estado toda mi vida con él, le ha dado mis mejores años, le he dado todo y ahora qué.
..-Bueno, no pasa nada, seguro que encontrarás a un hombre pronto. Seguro. A lo mejor lo tienes más cerca de lo que crees –le dije mientras la miraba poniéndole ojitos y moviendo las cejas de arriba abajo.
..-¿De verdad usted cree que encontraré una buena persona con la que compartir mi vida?
..-No, no, te he dicho que encontrarás un hombre, un hombre como cualquier otro, jejé. Te podría vender un cuento de hadas, pero no es mi estilo –«sólo si es para acabar en la cama», pensaba mientras se lo decía.
..-Si es que me tengo que reír cómo es usted.
..-Jejé, qué tonta eres.
..-Bueno, guapo, me voy a poner a limpiar un poco que para algo me paga, ¿no? –dijo Vicky intentando dejar atrás todo el dolor que había soltado. Serán tonterías, yo lo pienso, los cotilleos y esas cosas no valen para nada, pero hay veces que necesitas hablar con alguien las cosas y desahogarte. Es lo único que te puede salvar. Eso ayuda, yo creo que los psicólogos son para los que no tienen amigos.
..-Por mí si quieres no trabajes y métete conmigo un ratito en la cama a abrazarme, aquí calentitos los dos –le dije yo.
..-Jajá. No, en serio, me pongo en marcha que si no me apalanco y a ver después quién se va.
..-Si quieres no te vayas, te quedas aquí.
..-Jajá, que tengo cosas que hacer. Bueno, voy a ir limpiando mientras voy haciendo una empanada y unos brócolis, que usted tiene que comer bien, jejé.
..-Puff, qué guasa tienes –le contesté mirándola fijamente a la cara, un rostro hermoso, y mirando también su poderoso cuerpo. Lo que daría por hacerla mía.
..-Pues yo me voy a dormir un rato más y ahora dentro de un poco voy por allí a hacerte compañía. ¿Vale, guapa? –dije pensando en verla después fregando y deleitarme con sus movimientos, esas caderas, esos pechos, esas piernas, esa cintura.
..-Ok, ok, descanse, que está usted flojucho ahora.
..-¡Y dale con el usted!
..-Bueno, me voy.
..-Síí –contestó llorando–, he estado toda mi vida con él, le ha dado mis mejores años, le he dado todo y ahora qué.
..-Bueno, no pasa nada, seguro que encontrarás a un hombre pronto. Seguro. A lo mejor lo tienes más cerca de lo que crees –le dije mientras la miraba poniéndole ojitos y moviendo las cejas de arriba abajo.
..-¿De verdad usted cree que encontraré una buena persona con la que compartir mi vida?
..-No, no, te he dicho que encontrarás un hombre, un hombre como cualquier otro, jejé. Te podría vender un cuento de hadas, pero no es mi estilo –«sólo si es para acabar en la cama», pensaba mientras se lo decía.
..-Si es que me tengo que reír cómo es usted.
..-Jejé, qué tonta eres.
..-Bueno, guapo, me voy a poner a limpiar un poco que para algo me paga, ¿no? –dijo Vicky intentando dejar atrás todo el dolor que había soltado. Serán tonterías, yo lo pienso, los cotilleos y esas cosas no valen para nada, pero hay veces que necesitas hablar con alguien las cosas y desahogarte. Es lo único que te puede salvar. Eso ayuda, yo creo que los psicólogos son para los que no tienen amigos.
..-Por mí si quieres no trabajes y métete conmigo un ratito en la cama a abrazarme, aquí calentitos los dos –le dije yo.
..-Jajá. No, en serio, me pongo en marcha que si no me apalanco y a ver después quién se va.
..-Si quieres no te vayas, te quedas aquí.
..-Jajá, que tengo cosas que hacer. Bueno, voy a ir limpiando mientras voy haciendo una empanada y unos brócolis, que usted tiene que comer bien, jejé.
..-Puff, qué guasa tienes –le contesté mirándola fijamente a la cara, un rostro hermoso, y mirando también su poderoso cuerpo. Lo que daría por hacerla mía.
..-Pues yo me voy a dormir un rato más y ahora dentro de un poco voy por allí a hacerte compañía. ¿Vale, guapa? –dije pensando en verla después fregando y deleitarme con sus movimientos, esas caderas, esos pechos, esas piernas, esa cintura.
..-Ok, ok, descanse, que está usted flojucho ahora.
..-¡Y dale con el usted!
..-Bueno, me voy.
..-Ciérrame la puerta y apaga la luz, anda.
.
.
..Intenté seguir en la cama pero no aguanté mucho. Tenía la garganta llena de porquería y me estaba meando. Fui al baño y escupí una bola asquerosa de moco y sangre y le cambié el agua al canario. De pronto me dio una arcada y vomité. Me lavé un poco la boca y fui a ver a Vicky.
.
.
..-Ah, has traído el diario –le dije y empecé a leerlo. Tonterías sobre la ciudad, incautamientos de drogas, violaciones, muertes, guerras, pasatiempos, esquelas, anuncios de prostitución... lo típico. Pero los telediarios son aún peor.
Etiquetas: Absurdrealismo, alcohol, bohemia, Bukowski, Existencialismo, Generación de la Primera Crisis Siglo XXI, literatura, Nueva narrativa gaditana, Relato
0 comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio